Se encuentra localizado en el coro alto de la iglesia.
Se trata de un instrumento barroco del que no se conoce su autoría, aunque podría tratarse obra de Salvador Pabón y Valdés o de alguno de sus discípulos, y construido en el s. XVIII.
Sobre 1940 fue modificado por Pedro Ghys Guillemín, quién hizo de él un órgano romántico. Posteriormente, Luis Val Macho modernizó su alimentación de aire y finalmente, en una tercera intervención, Francisco Alonso Suárez trató de devolverle su concepción inicial.
Sobre su fachada principal se aprecian tres castillos de tubería, siendo el central en forma de torreón y con tubos de mayor calibre. En cada una de sus fachadas laterales, ligeramente en chaflán, se dispone un castillo de tubería en madera para contras. Según puede apreciarse desde abajo, la caja está practicamente hueca y carece de su tubería interior y de otros elementos funcionales del instrumento.
También es visible una doble línea de orificios para el arranque de la desaparecida trompetería horizontal.
Sobre la bella ornamentación superior de la caja destaca un medallón con la talla de una custodia y un símbolo sacramental.
Según documentación consultada, tuvo consola en ventana en sus orígenes, la cual se recuperaría en su tercera intervención.