Se encuentra en posición elevada entre dos pilares, dando su fachada frontal a la nave central y, su contrafachada, a la nave lateral de la Epístola, dotadas ambas fachadas de tubería vertical y trompetería horizontal. Sus fachadas laterales están profúsamente decoradas, aunque exentas de tubería.
Se trata de un instrumento barroco tardío o rococó, el cual fue construido entre 1744 y 1746 por Leonardo Fernández Dávila, asistido por el organero Jorge Bosch, y habiendo sido intevenido en sucesivas ocasiones posteriormente.
Entre la recargada decoración de su fachada principal destacan sus tres castillos torreón (extremos y central), entre los cuales se entremezclan numerosos campos de tubería de menor calibre, en diferentes niveles y dispuestos de forma cóncava, algunos, y convexa, otros. Muchos de estos tuvos son canónigos.
Su compleja trompetería se distribuye de la siguiente forma: un gran medio abanico a dos filas bajo cada uno de los torreones extremos, un abanico a doble fila bajo el torreón central, un abanico de tubos de pequeña envergadura a cinco filas bajo cada uno de los cuatro castillos intermedios del cuerpo medio de la caja y, finalmente, una fila de trompetas sobre la parte superior de la cadereta de espalda.
La cadereta exterior mantiene una complejidad de campos y ornamentación muy similar a la caja principal contanto, como se ha mencionado anteriormente, con una hilera de trompetería horizontal.
En definitiva, la descripción del aspecto del instrumento es tarea ardua, por lo que resulta más práctico para ello su contemplación directa.
En el lugar inferior de esta fachada principal se encuentra la consola, en ventana, compuesta de tres manuales, siendo el superior para el órgano mayor, el central para la cadereta de ecos y el inferior para la cadereta exterior. Estos teclados fueron introducidos en la intervención realizada por OESA en 1972. Igualmente, dicha consola dispone de un grupo de pestañas para ejecución de contras, así como un grupo de tiradores de registros a ambos lados.
La contrafachada sigue una línea muy parecida a la fachada frontal, contando igualmente con numerosos campos y frondosa ornamentación. Como diferencias apreciables, habría que citar que tan solo el castillo central es del tipo torreón; que su trompetería es notablemente más reducida, contanto con solo cinco abanicos de tubos de pequeño calibre; y claro está, la ausencia de mueble de cadereta exterior.
Al igual que la fachada frontal, existen campos o castillos compuestos de tubos canónigos.
Las transmisiones de teclado y registros son manuales para los tres órganos.
Posee dos fuelles superpuestos alimentados por una motobomba.
El instrumento se encuentra plenamente operativo y es usado en la liturgia y eventos musicales.